Desde el año 2013 no se dimensionaba una  situación tan grave como la que enfrentan hoy los productores de Café, en ese  entonces, el vicepresidente Angelino Garzón negoció con los cafeteros un techo de $700.000 para la carga de café, un  piso de $480.000 y un ingreso de $145.000 para los cultivadores, acuerdo que  tomó en nombre de “Protección al Ingreso de los Caficultores (PIC), y en el AIC  (Apoyo al Ingreso del Caficultor) se pasó de 60 a 115 mil pesos por carga de  café a pequeños caficultores, propietarios de fincas de menos de 20 hectáreas”.  

Hoy el campesino vende  a 60 mil pesos la arroba de café y los costos de producción ascienden a 77 mil  pesos, y a eso se suma que un bulto de insumos puede estar costando alrededor  de 110 mil pesos. De modo que la situación es crítica no sólo desde la base de  producción del café, sino que además ha habido denuncias por bultos de café que  han entrado al país importados desde el brasil.   

“Hoy estamos recogiendo los frutos de la decisión del gobierno de  no cumplimiento de las actas, volvemos a tener nuevamente el café por debajo de  70 mil pesos con un agravante y es que los costos de producción, los agro  insumos, los abonos cada vez son más caros, un bulto puede costar hasta 110 mil  pesos cuando en ese tiempo (2013) costaba 60 mil, le dijimos al gobierno y este  hizo caso omiso. Ahorita nos encontramos en una situación peor que el 2013. Es  por esto que los dirigentes de Dignidad Cafetera recorrimos todo el país para  experimentar y dialogar con las bases a ver qué pensaban y como ven la situación,  decidimos reunirnos en Pereira hace 20 días y allí tomamos la decisión de  decirle al gobierno de una vez por todas que nosotros no somos beligerantes y  no protestamos porque nos gusta, pero que desafortunadamente si las cosas  siguen de esta manera nos va a tocar irnos a un gran paro nacional”, afirmó Carlos  Arturo López Ríos, Vocero de Dignidad Cafetera y Fiscal de Dignidad  Agropecuaria Nacional.  

Como un acto simbólico los cafeteros del  país se han dado cita en la ciudad de armenia el próximo 24 de abril, para  alzar una voz de protesta, “para decirle al gobierno que no nos gustan las vías  de hecho. Nos reunimos en Pereira con el Ministro de Agricultura y a hoy no ha  pasado nada, hablan de una ley del fondo de estabilización que nosotros hemos  ayudado a construir pero no se ve la plata por ningún lado. Dice el ministro de  hacienda que no hay retroactivo, entonces las regiones como Risaralda, Quindío,  Cauca, Huila que estamos recogiendo ya casi el 70 por ciento de la cosecha este  año ¿vamos a quedar sin nada? ¿Seguimos perdiendo?”, agregó.   

Los cafeteros se han esforzado en  recalcar que no quieren presencia de políticos durante el acto simbólico del 24  de abril, pues manifiestan es la propia clase dirigente la que se ha encargado  de que el presupuesto para agricultura en el país no supere el billón de pesos.  “Esos mismos quieren con poncho y sombrero subirse a la tarima a decir que  ellos están con nosotros o que son hijos de campesinos, que nacieron tomando  café en la finca, pero de hechos no se ve nada, así son la mayoría de  políticos, representantes y senadores   que tenemos”.  

Además el vocero de dignidad cafetera  asegura que el presidente Iván Duque durante su campaña, sabía los costos de  producción que estaban generando una pérdida en la rentabilidad a los cafeteros  de hasta 15 mil pesos por arroba, y sin embargo hoy no se manifiesta para dar  pasos de avanzada hacia un precio más justo. “78.200 pesos en este momento de  crisis sería lo justo para que se pudiera activar el mecanismo y de ahí para  abajo el gobierno subsidie a los campesinos que en este momento estamos  recogiendo café a pérdida”, aseguró Carlos Arturo López   

Para los campesinos, el problema nació en  la iniciativa que tomó la Federación Nacional de Cafeteros, al derribar el  cultivo tradicional y la biodiversidad que brindaba sombra a los árboles de  café, esto sumado al comercio con genomas de otras especies de café  internacional, han sumido a los cafeteros en una crisis que parece no tener  fin. “Seguramente lo hicieron para favorecer a las multinacionales y a los  ricos del país, porque para eso se requiere maquinaria, eso no lo va a hacer  ningún campesino; con esto van a ir desplazando el café Arábiga que nosotros  producimos. Por otro lado la Federación misma autoriza la importación de pasillas  de pésima calidad del Brasil y del Perú con el discurso barato que es para cumplir  unos contratos de café liofilizado. La pregunta es ¿por qué no nos pagan las  pasillas nuestras que son de mejor calidad, impidiendo que se beneficien los  campesinos de a pie que son los que debería representar la federación?”.  

Por último el vocero de Dignidad Cafetera  expresó que los cafeteros sí quieren Queremos la ley de financiamiento, pero  con fondos que respondan a sus necesidades, establecidos “queremos que se  recupere la calidad del café colombiano. Nosotros ya no tenemos el mejor café,  nos superaron hace tiempo otros países porque todavía cultivan bajo sombra con  condiciones de biodiversidad, tecnología de punta y los conocimientos  ancestrales de nuestros abuelos, mientras acá se lucha por 10 hectáreas de  árboles a libre exposición solar y con especies genéticamente modificadas,  entonces ¿cómo quieren que nos paguen bien el café en Europa?”.  

Extendió además una invitación a todos  los cafeteros de Pereira y del viejo Caldas para se hagan presentes el próximo  24 de abril, “este es un movimiento sin distingo político, aquí hay de todos  los colores pero lo único que nos une es rescatar la dignidad de los cafeteros  colombianos”, concluyó.