Un satélite de la Agencia Espacial Europea (ESA), el ERS-2, está programado para reingresar a la atmósfera terrestre este miércoles por la mañana. La ESA, junto con una red de vigilancia internacional, está monitoreando el satélite para rastrear su reentrada, programada aproximadamente para las 6:14 a.m. ET, con una ventana de incertidumbre de 15 horas.
Debido a la naturaleza "natural" de la reentrada del satélite y la imprevisibilidad de la actividad solar, no se puede determinar exactamente dónde ni cuándo ocurrirá la reentrada. Sin embargo, se espera que la mayoría de los fragmentos se quemen en la atmósfera, y cualquier resto que alcance la superficie probablemente caerá en el océano, sin contener sustancias nocivas.
El ERS-2, lanzado en 1995, fue un satélite avanzado de observación de la Tierra que recopiló datos cruciales sobre el clima, los océanos y las superficies terrestres. A pesar de que la misión concluyó en 2011 y el satélite fue retirado de la órbita terrestre, su legado sigue siendo relevante hoy en día, ya que los datos recopilados continúan siendo utilizados en diversas investigaciones científicas.
Las posibilidades de que los desechos espaciales representen un riesgo para las personas son extremadamente bajas, según la ESA, con probabilidades de menos de 1 entre 100.000 millones.