Recorrer los municipios de Risaralda es ratificar que nuestros campesinos, los empresarios del campo son la fuerza que nos ha posicionado como un territorio verde y pujante y escuchar sus necesidades nos obliga a trazar planes y tareas que permitan no sólo su supervivencia, sino mejorar sus condiciones. 

La evolución de esos empresarios del campo nos muestra un desarrollo económico en cada municipio frente al que hoy tenemos que asumir un compromiso de apoyo y acompañamiento, para impulsarlos. Por eso nos complacen las alianzas que hemos constituido como cámara de comercio con autoridades locales para realizar el censo empresarial en varios municipios de Risaralda, con el propósito de determinar el potencial de comerciantes formales e informales, promover el fortalecimiento empresarial a través de la formalización e identificar las oportunidades para lograr la dinamización de comerciantes y empresarios. 

En Pereira la realización de este censo nos ha permitido reducir el índice de informalidad empresarial a tal punto que somos referente nacional. Hoy esa informalidad es de 7,55% en la capital risaraldense y cuando iniciamos la aplicación de esta estrategia, ese mismo índice alcanzaba el 18,44%. Por eso pretendemos replicar el modelo en otros municipios y ayudar a mejorar esas cifras. 

El censo en los municipios inició en La Virginia donde se hallaron 1.048 comerciantes y en el municipio de Quinchía en donde fueron censados 477 comerciantes, incluyendo los establecimientos del corregimiento de Irra. Actualmente el equipo de encuestadores se encuentra censando los comerciantes del municipio de Guática, que incluye los corregimientos de Santa Ana y San Clemente. 

El ejercicio no termina con la realización y tabulación de las encuestas; a partir de la información recaudada adelantamos la notificación a los comerciantes hallados en informalidad, a quienes se les hace un acompañamiento para que adelanten los trámites de matrícula. Pero ese apoyo no sólo implica llevar a que los empresarios y comerciantes se formalicen; también comprende un proceso de formación y asesoría en temas para mejorar sus condiciones. Por ello es nuestro propósito llegar hasta donde están esos comerciantes y facilitarles los trámites. 

Fue así como inauguramos nuestra sede en Apía, para atender a los 500 comerciantes y establecimientos de comercio de esa localidad, así como a los comerciantes de Pueblo Rico, a quienes les queda más fácil el acceso a esta sede. 

Dentro de las acciones para apoyar a los empresarios y comerciantes, también se empezarán a establecer los corresponsales camerales, que estarán en las zonas donde aún la entidad no cuenta con sede propia. 

Vamos por Risaralda, vamos por nuestros empresarios del campo, vamos por nuestros comerciantes, que son motor de desarrollo. 

Por Jorge Iván Ramírez Cadavid-Presidente Ejecutivo Cámara de Comercio de Pereira