Escribir es un arte, que se convierte en magia cuando logramos sumergirnos en un mundo imaginario e ideal, dependiendo de lo que plasmemos en el papel, hablo particularmente de los que escribimos cuentos, entre más tiempo se tarda uno en escribirlo es mejor, se percibe la vida de otro modo, es como si se viviera dentro de esa historia que se está inventando y de la cual no quieres salir jamás. 

Hago este preámbulo, porque considero que en nuestra ciudad no se promueve el hábito por la escritura, en cuanto a la lectura un poco, a través de las pocas bibliotecas bien dotadas que tenemos, aunque estos son hábitos que debemos inculcar en cada hogar, justo en el momento en que nuestros hijos aprenden a leer. 

Lo que pretendo al hablar de estos hábitos, es hacer énfasis a la poca promoción de la cultura hacía esta forma de expresión, como es la escritura, en particular a la necesidad de realizar más concursos literarios en la ciudad, puesto que solo conozco el Festival literario de Pereira (Felipe), que se realiza entre el mes de mayo y julio, considero que hacen falta empresas privadas y gubernamentales, que patrocinen esta clase de eventos, podría ser también la Alcaldía de Pereira quien destine anualmente un  presupuesto para promover convocatorias a concursos literarios, como cuentos, novelas, ensayos, microrrelatos, concursos de ortografía, gramática, entre otros. 

A nivel de país si hay muchas más convocatorias a esta clase de concursos, pero si nos comparamos con otros países nos quedamos muy cortos, un ejemplo de esto que creo vale la pena destacar, es España, donde anualmente hay cientos de convocatorias a concursos en todos los ámbitos literarios, y que pueden participar toda clase de escritores sin restricción por nacionalidad. Quiero compartirles uno en particular que me llama la atención, es un concurso de microrrelato que realiza Bodegas Sánchez Romate Hermanos, una empresa familiar de tradición, que lleva muchos años comercializando brandy de jerez, y así como esta, existen muchas organizaciones de toda índole, que impulsan a escritores, tengan o no una larga trayectoria. 

Esto deberíamos seguirlo como ejemplo, porque es una forma de ocupar nuestra mente en cosas que hacen bien a nuestro espíritu, en un país donde la palabra CORRUPCIÓN es tan común, que hasta el que no sabe leer, ni escribir sabe lo que significa.